Colectivas, colectivos, individualidades solidarias, familias y medios libres que respondieron al llamando de cartas dirigidas al juez Juan León Montiel: tengan por seguro que nuestra exigencia de libertad resonará en ese juzgado q se jacta de ser representante de aquella mujer vendada de los ojos. Símbolo nefasto de sometimiento, q se balancea a favor de la ceguera.
Gracias a la presencia de ustedes sumado al trabajo de Los Otros Abogadoz, después de distintos pretextos, se logró conseguir la fecha de la audiencia final.
Sin embargo, el secretario de acuerdos, Alejandro Escobar en ausencia del juez x estar de vacaciones, determinó de nueva cuenta corromper sus propias leyes, y a pesar de q su código de procedimientos penales dice en el artículo 459, q el mismo día en q la defensa presente sus conclusiones de inculpabilidad (9 de julio en este caso), se citará para la audiencia final, la cuál, deberá efectuarse dentro de los cinco días siguientes….decidió este 27 de julio, darla hasta el 28 de septiembre, es decir, en más de dos meses. Cinco días q se convirtieron en 64.
64 días más para q el juez pueda iniciar con el supuesto estudio de los seis tomos q forman el expediente y dictar sentencia.
64 días más q alargan nuevamente y sin razón alguna, el encierro de Miguel.
Pero también son 64 días que no nos callaran, cómo pretenden hacerlo, no nos cansaremos de mostrar nuestro coraje e inconformidad con sus formas de balancearse.
Acudimos a ustedes para q recarguemos fuerzas y accionemos. No dejemos de exigir la salida inmediata de nuestros compañeros, de esas mazmorras q les mantienen presos. Así como ellos, rompamos sus códigos, sus leyes. Desobedecer nos sabe muy bien.
Gritemos de todas las formas e inventemos muchas más hasta verles en la calle.
Que nuestro corazón anticarcelario no deje de palpitar.